lunes, febrero 28, 2005

A ver venga vea Quito largo venga venga.

Guayaquil amaneció con paro de transporte público. Así que hoy, los señores taxistas autorizados, los taxi-amigos, furgoneteros, camioneteros, bicicleteros y toda caja con ruedas hara su agosto en febrero.

¿La razón? Los buseteros se quieren defender de lo que consideran una agresión por parte de los usuarios (mayormente jubilados que sacan la cara por la ciudadanía, discapacitados y estudiantes), que les arrancan el torniquete de conteo de pasajeros de cada unidad.

Quienes nos trepamos alguna vez a un bus conocemos y odiamos dicho aparato. Es una verguenza para los ancianos, las embarazadas, y los discapacitados (si es que los cogia el bus en la esquina), y atentaba contra la dignidad de los estudiantes. ¿Quien no recuerda a los chicos uniformados que tenian que arrastrarse debajo de dicho aparato para pagar medio pasaje?

Para lo unico que servia era para que los vendedores entrenaran para los olimpiadas de caramancheles en la modalidad de 100 metros vallas.

La medida de eliminacion se oficializó hace algunos meses. Pero faltaba solo un poco de decisión. ¿Pero de quien debía venir? Del gobernador Efren Roca. Quienes lo vemos en el noticiero sabemos las mamarrachadas que es capaz de decir dicho individuo. Y desde esta tribuna lo responsabilizamos directamente a él por dilatar una medida más tiempo de lo necesario.

Diálogo sin acción no sirve para nada. Ahora, la ciudadanía ha tomado bandos en la disputa. Todo por no amarrarse los pantalones a tiempo. ¿No es cierto Gobernador Roca?