Los Astros recibieron ayer una puñalada fatal en el juego 3 de la Serie mundial al caer en la 14ta entrada ante los Medias Blancas de Chicago.
Pese a que en la parte baja de la novena entrada estuvieron a un hit de ganar su primer partido de la serie, simplemente a la ofensiva tejana le faltó el empuje final. Empuje que sí tuvo Blum de Chicago al conectar un jonrón solitario que condujo al pánico a los de Houston que luego permitieron otra carrera más gracias a una base por bolas.
¿Y ahora? ¿Se recuperarán los Astros estando un 3-0 abajo?
Yo lo dudo.
(Y anoche se marcó un nuevo récord en duración de un partido de Serie Mundial. El partido empezó a las 19:39 de ayer y terminó en la madrugada, a la 01:19 de hoy).
Damn it, ojalá no me quede dormido en mi puesto.
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